Nuevos adoquines de la Quinta Avenida se quiebran a la primera
Pese a que Laura Beristain jura que los nuevos adoquines que están siendo colocados a “paso de tortuga” en la Quinta Avenida tienen una durabilidad de 30 años, la realidad es que están de “mírame y no me toques”.
Aunque la presunta remodelación no va ni a la mitad, luego de casi seis meses de obras, de entre los pocos adoquines que ya han sido colocados ya se pueden observar varios rotos.
En algunas calles se pueden ver montoncitos con adocretos quebrados y que ya no pueden ser colocados.
Esto pone en duda la calidad de la obra, cuyo costo asciende a más de 107 millones de pesos.
La mala calidad de la obra aunado a que se tiene claro cuando concluirán, lo que tiene molestos a los ciudadanos y desesperados a los pocos empresarios que aún se mantienen.